Corredurías de seguros y reaseguros, qué debes saber

Cuando se trata de asegurar nuestra calidad de vida y prepararnos para imprevistos o catástrofes es importante prestar atención a los detalles. Costes, coberturas y límites, serán fundamentales para no tener sorpresas indeseadas en un momento de necesidad. Las Corredurías de seguros y reaseguros son intermediarios entre las compañías y los asegurados, de forma que conocen las distintas opciones del mercado y dominan las coberturas que puedas necesitar cubrir.

En la actualidad existen muchas empresas especializadas en este servicio, un buen ejemplo es Fronting.es, una correduría de seguros y reaseguros de capital netamente español y no vinculada a grupos financieros ni entidades aseguradoras, buscando la independencia de intereses. Este será un punto importante a la hora de buscar una correduría de seguros; sin embargo, hoy veremos algunos puntos a tener en cuenta a la hora de trabajar con ellas.

Las corredurías de seguros y reaseguros son asesores especializados en contratos de seguros, por lo que pueden explicarte cualquier punto para que obtengas un asesoramiento personalizado profesional. Por ello, es importante buscar una empresa especializada en el tipo de seguro que buscas, ya sea de particulares, empresas, hogar, vehículos, etc.

¿Cuáles son las funciones de una correduría?

Como venimos comentando, las corredurías trabaja habitualmente de manera independiente a las aseguradoras, buscando las condiciones de mercado que más se ajusten a las necesidades de los clientes. Incluso, periódicamente pueden revisar los seguros que tienes contratados con ellos para ver si las nuevas ofertas de las compañías son más beneficiosas para ti.

Además, las corredurías de seguros y reaseguros se responsabilizan de todo lo que tiene que ver con el contrato, de forma que con leer los contratos y firmarlos, ellos se deben encargar de todas las gestiones, incluso en el caso de querer cambiar de un seguro a otro.

El asesoramiento se prolonga durante el periodo del servicio, de forma de que si tienes un siniestro también te asesorarán sobre cómo dar el parte para no tener problemas o, incluso, ellos mismos se encargarán de todo para que los tecnicismos no terminen por arruinar tu experiencia con el seguro.

En realidad, tendrás que firmar y leer siempre el contrato, pero ahorrarás mucho tiempo en pedir y comparar presupuestos. El propio profesional te pedirá información sobre tus intereses para elegir adecuadamente y, si tienes dudas sobre si coger o no una cobertura, pueden ayudarte a determinar las condiciones más adecuadas para tu situación particular.

Habitualmente, los costes de contratar a través de este tipo de intermediarios no suelen encarecer el gasto en seguros de las personas, empresas u hogares, ya que el gran volumen de seguros que gestionan les ponen en posición de negociar mejores opciones de forma que el cliente no debe asumir costes extras e, incluso, pueden llegar a tener mejores condiciones.

Diferencia entre Corredor de Seguros y Agente de Seguros

La figura del Corredor de Seguros y la del Agente de Seguros son diferentes y será importante a la hora de elegir adecuadamente al profesional con el que trabajar en base a tu necesidad e intereses.

Si el Corredor de Seguros es una figura que media de forma independiente e  imaparcial, trabajando en base a criterios objetivos profesionales y comparando entre opciones de mercado, los agentes de seguros son los mediadores de seguros vinculados a una entidad aseguradora con contratos de agencia.

Pueden ser exclusivos de una aseguradora o a varias de ellas (normalmente cuando se trata de grupos aseguradores), aunque lo normal es que sean incluso formador por las aseguradoras para la que van a trabajar.