Cómo elegir restaurante al estar fuera de casa
Publicado el agosto 18, 2021
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6 Cuando viajamos a lugares fuera de nuestro entorno más cercano, es posible que sintamos desconcierto a la hora de elegir restaurante o cafetería para desayunar, comer o cenar. Una cuenta demasiado alta con mala relación calidad-precio, unos platos que prometían y que terminan por azotar el paladar de forma grotesca o un servicio que casi dan ganas de pedir perdón por sentarse a la mesa; pueden convertir un momento agradable en una tosca experiencia.
Elegir restaurante en vacaciones y escapadas siempre tiene ese punto de descubrimiento que merece la pena disfrutar; por lo que, aunque nada es infalible, te dejo con el decálogo de consejos para elegir restaurante en tu próxima escapada u ocasión.
- La observación es clave para elegir restaurante o cafetería de forma correcta, pero lo primero que debes tener claro es qué tipo de lugar buscas y cuál es tu expectativa y presupuesto. Acotar el tipo de comida (rápida, gourmet, etc.) y la cantidad de dinero que queremos gastar nos ayudará a elegir el sitio más adecuado para cada persona.
- Dentro de la observación, echa un ojo a las mesas ocupadas del sitio. ¿Está lleno por personas de la zona?¿Los platos de las mesas coinciden con las fotos de los menús? ¿Se mantiene la higiene de forma ágil? ¿La gente deja sus platos con muchos restos porque las raciones son grandes o porque no está demasiado bueno? Auto-responder estas preguntas te ayudará a hacerte una idea de la comida que ofrecen y del restaurante en el que entras.
- Para hacerte una idea sobre el servicio, puedes observar a las mesas ocupadas para ver si están buscando a los camareros o si están bien atendidos. Algo en lo que me fijo siempre, es si los camareros van esquivando a los clientes con la mirada, antes de entrar; para hacerme una idea de la reacción que puedo esperar.
- Revisa los precios y la carta antes de entrar. Así, sabrás si se ajusta a tus expectativas y, de paso, podrás hacerte una idea sobre el tipo de comida. Los expertos apuntan a que cartas demasiado largas pueden ser buena opción ante variedad de gustos, pero también hace que sea más complicado mantener el nivel de calidad en todos los platos.
- A veces, elegir restaurante es complicado cuando el presupuesto es ajustado y no tenemos demasiada movilidad. Recuerda que grandes cadenas de restauración tienen precios más estandarizados; te permitirán hacerte una idea de los precios que vas a encontrar.
- El ticket medio de los restaurantes viene, en gran medida, determinado por la zona, por lo que, habitualmente, en zonas turísticas será más caro comer y, en algunos casos, puede que de peor calidad. Esto no siempre se cumple, pero en los casos donde la calidad es alta y la ubicación muy buena, el precio suele estar por encima del ticket medio.
- Si buscas buena calidad a mejor precio, lo mejor suele ser salir de puntos céntricos y buscar un restaurante local donde veas a muchas familias “autóctonas”; o, incluso, puedes preguntarles directamente. Si conoces a alguien en la zona, no dudes en contactar para que te recomiende algún sitio interesante.
- Para elegir restaurante, debes tener en cuenta el olor que desprende el sitio. No se trata solo de la limpieza, sino de hacerte una idea de cómo puede saber la comida; no en vano, el aroma es gran parte del sentido del gusto. De hecho, muchas cadenas utilizan aromas para crear su propia seña de identidad y la propagan para atraer al público.
- Las opiniones online son grandes aliadas, pero debes revisar que los comentarios sean recientes y no “sospechosos” (es decir, que se hayan publicado mucho comentarios en un periodo corto de tiempo y que nadie vuelva a comentar después o el resto sean negativos, etc.). Dentro del mundo online, también puedes buscar restaurantes recomendados por guías oficiales o gastronómicas, pero ten en cuenta que casi ninguna opinión es objetiva y/o desinteresada.
- Por último, para elegir restaurante cuando estamos fuera de nuestra zona conocida, es importante ir con una actitud positiva y dejarse sorprender. Si quieres un servicio mejor, busca horarios que no sean franja roja en el servicio para no tener al personal saturado; a veces, marca la diferencia en todo: de una paella de calidad a una tanda de paellas quemadas, de un trato agradable a ver corriendo a los trabajadores de un lado para otro, etc.